TIPOS DE CONFLICTOS
El conflicto puede actuar como una fuerza positiva o
negativa, de modo que la dirección no debe esforzarse en que desaparezca, sino
eliminar a los que afecten negativamente a los esfuerzos que la organización
dedica a alcanzar sus objetivos. Los conflictos se pueden definir en función de
los efectos que produce en una organización. Bajo este punto de vista los
conflictos pueden ser funcionales y disfuncionales.
Conflicto
Funcional:
Es una
confrontación entre grupos que resulta positiva para el rendimiento de la
organización. Por ejemplo, puede desatarse entre dos departamentos de un mismo
hospital con respecto al sistema más eficaz para prestar atención sanitaria a
las familias de renta baja del medio rural.
Ambos departamentos están de acuerdo con respecto
al objetivo, pero no en cuanto a los medios para alcanzarlo. Cualquier que sea
la solución, lo probable es que las familias de baja renta del medio rural
reciban mejor atención medica cuando se resuelva el conflicto.
Si en las organizaciones no se produjeran
conflictos de este tipo, habría pocos motivos para introducir cambios y la
mayoría de los grupos llegarían a una situación de práctica inactividad.
Conflicto
Disfuncional:
Es cualquier
confrontación o interacción entre grupos que perjudica a la organización o
impide que esta alcance sus objetivos. La dirección debe tratar de eliminar los
conflictos de este tipo.Un conflicto beneficioso se torna a menudo perjudicial.
En la mayor parte de los casos es imposible el identificar con precisión el
momento en que un conflicto funcional se convierte en disfuncional. Un nivel
idéntico de tensiones y conflictos, que da lugar a que un grupo avance de forma
saludable y positiva hacia sus objetivos, puede resultar perturbador y
disfuncional en otro grupo (o incluso en el mismo grupo en otro momento).
La tolerancia de un grupo con respecto a las
tensiones y conflictos también puede depender del tipo de organización a la que
sirve. Los conflictos disfuncionales pueden afectar negativamente al
rendimiento de personas, grupos y organizaciones.
TIPOS DE ESTILO PARA RESOLVER LOS
CONFLICTOS
Los estilos más comunes de enfrentar los conflictos
dentro de las organizaciones son los siguientes:
Evasión:
Retirarse o evitar el conflicto, se usa cuando el
conflicto es trivial, cuando las emociones están alteradas.
Acomodación:
Es mantener relaciones armoniosas al poner las
necesidades de otros sobre los propios, se usa cuando la cuestión en disputa no
tiene tanta importancia.
Imposición:
Usted intenta satisfacer sus propias necesidades,
se usa cuando se necesita una respuesta rápida a problemas importantes en las
que deben tomarse acciones impopulares y cuando el compromiso con otros no es
fundamental.
Compromiso:
Cuando se
requiere que cada parte entregue algo de valor, se usa cuando las partes tienen
un poder similar y cuando es necesario alcanzar una solución temporal a un
problema complejo.
Colaboración:
Todos buscan
satisfacer sus necesidades, se basa en una discusión abierta y sincera entre
las partes.